Joana Ribeiro es portuguesa, y desde que en 2012 descubrió los grandes veleros no ha dejado de estar vinculada a ellos. Nos cuenta sus experiencias a bordo de estos buques clásicos, cómo se embarco por primera vez y los países que ha visitado gracias a APORVELA, la asociación de sail training portuguesa a la que pertenece.
¿Qué edad tenías cuando te embarcaste?
Me embarqué por primera vez en un Tall Ship con 19 años.
¿En cuántos barcos has estado embarcada?
En tres: la carabela Vera Cruz, el NTM Creoula y en el Gulden Leeuw.
¿Por qué decidiste embarcarte?
Mi experiencia a bordo de estos barcos fue un pequeño viaje a bordo de la carabela Vera Cruz para ir a ver la Volvo Ocean Race en 2012, que comenzaba en Lisboa. La experiencia me encantó, me sentía como una autentica pirata jajaja. Me enamoré. Desde entonces siempre estoy buscando la oportunidad de subirme a unos de estos barcos de nuevo y vivir nuevas y más grandes aventuras.
¿Cómo descubriste el mundo de los Tall Ships o buques clásicos?
Todo este mundo lo conocí a través de APORVELA, una asociación portuguesa que promueve la Tall Ship Race en Lisboa. Actualmente formo parte de ella intentando promover la vela clásica y sus valores por todo el mundo.
¿Cuánto tiempo estuviste embarcado?
Mi travesía mas larga ha sido de un mes, y lo máximo que he estado sin pisar tierra han sido dos semanas. ¡Cómo la llegas a echar de menos!. Aunque he salido muchas veces a la mar.
¿Qué ciudades visitaste?
Normalmente viajamos a lo largo de la costa portuguesa. Una de mis paradas favoritas es la isla de Berlanga y, bueno, evidentemente me gusta navegar a lo largo del Tajo. Lisboa fue construida para verse desde el río, y se nota cuando estás subido en uno de estos barcos remontándolo. Subir por el río Douro también es una experiencia preciosa y que recomiendo a todo el mundo. Además de estar por toda la costa portuguesa he visitado otros países. He ido a Londres, Burdeos y Cherbourg en Francia. Uno de mis puertos favoritos es el de A Coruña y las islas Cies.
¿Qué hacías en tu tiempo libre?
Pues hacer nudos, nudos, nudos… y más nudos.
¿Alguna anécdota a bordo?
A bordo de la carabela Vera Cruz no puedes escalar para llegar a las vergas y te tienen que subir elevándote con un sistema de cabos. La cosa es que cuando estás arriba te preguntan si tienes monedas, y si no es así te dejan allí arriba jajajaja.
¿Recomendarías la experiencia de navegar?
De verdad que recomiendo el sail training. El trabajo en equipo rodeado completamente por mar y sin móviles o conexión a internet es toda una experiencia. Lo realmente importante en estos barcos es pasárselo bien, que todo el mundo esté a gusto, tener una buena experiencia a bordo y bueno, que el barco siga en el rumbo adecuado.
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